2012/09/27

Sant Miqueu de Ereñusarre

San Miguel es uno de los grandes mitos cristianos/paganos. Sí, pagano también, porque no hay uno sin otro. En el discurso el bíblico, es el arcángel que lucha contra el levantisco Lucifer (“quién como Dios” sería la traducción de Miguel). En la religiosidad popular es el vencedor del dragón, que se puede interpretar como una forma del diablo, o simplemente como un animal mítico anterior al cristianismo. El Pirineo, y el mundo entero, está lleno de dragones, vinculados a cuevas, a la meteorología, a la fertilidad… San Miguel no es el único santo cristiano que combate al dragón, pero sí el principal, o al menos cuando la leyenda se ubica en un espacio concreto.
De esos sanmigueles, por mi origen navarro (mi bisabuela, hija del herrero de Zubieta, se apellidaba San Miguel), mi favorito es el de Aralar.
San Miguel de Aralar: la iglesia románica se ha superpuesto
al edificio anterior, dentro del cual está el agujero que lleva
a la sima donde habitaba el dragón.

 
 Pero hay otra variante de la religiosidad popular que también me gusta mucho, porque tiene un punto incluso cómico. Y también tiene, cómo no, sus variantes por las diferentes comarcas pirenaicas. Ya lo habrán deducido por el título: Sant Miqueu es gascón, aranés concretamente, de Vielha para más señas. Ereñusarre es un monte sobre la ría de Urdaibai, en pleno corazón de Bizkaia. Y sobre el monte, una ermita, cuya advocación ya imaginan. Al pie del monte está la célebre cueva de Santimamiñe, cuyo nombre responde a otra ermita, dedicada a San Mamés con sus correspondientes virtudes míticas. Ambas comarcas, la marítima y la altopirenaica, están plagadas de mitos paganos y cristianos que conforman una rica religiosidad popular, además de un patrimonio natural, arqueológico e histórico notable, y otros valiosos patrimonios inmateriales vinculados a la oralidad.

A lo que íbamos, que en un tiempo prometí ser breve: A partir de la iglesia de Sant Miqueu, arriu Nere arriba, se halla la “Roca des Nau Horats”, literalmente de los nueve agujeros. El diablo y San Miquel se jugaron la posesión espiritual del Aran a un juego de tiro al blanco lanzando grandes piedras contra la roca. Está claro quién ganó.
La Roca dels Naus Horats desde la carretera que sube al (o baja del) túnel de Vielha.
 
En Ereñusarre, un muchacho golpeó con la mano la ventana, por lo que el diablo se zafó del pie que lo aprisionaba y lo persiguió. San Miguel lo atrapó en solo tres saltos, como demuestran las marcas de sus pies grabadas en las rocas cercanas a la ermita. En Aran y en Bizkaia (y en la Garrotxa, aunque en aquella comarca San Martín sustituye al arcángel) la superioridad del cristianismo se explicita en un relato un punto naïf.
Ereñusarre desde Ereño. Los restos arqueológicos ratifican lo que ya indica
el topónimo (sarre, zaharra en batua), que Ereño primeramente estuvo en lo alto.
Y antes que la arqueología, otras leyendas nos lo contaban. Eso sí:
incidiendo en el valor moral, valor mucho más importante en
el pensamiento tradicional que cualquier aserto científico.
 

¿Qué habría sido del cristianismo si no hubiera tenido tantos diablos y genios paganos que combatir? ¿Cómo se habrían llenado nuestros montes de ermitas, de cruces, piedras, humilladeros, campanarios, de oquedades y sobre todo de leyendas que cubren nuestra geografía? Si la respuesta les interesa más allá de la pregunta retórica, retomen la entrada de abril “Historias trepitjantes” y visiten el blog de Francesc Roma. Y si les interesan las “huellas” míticas en la roca, también encontrarán al final de la misma entrada la referencia de un excelente artículo de Anton Erkoreka en la red.   

2012/09/18

Arantzan… nor?

Hoy, nueve de septiembre, se celebra la Virgen de Arantzazu. Ayer, 8 de septiembre, casi todas las demás. De las pirenaicas, tal vez la más conocida es la de Núria (Lurdes es caso aparte; pero no aparte de este blog). Ambas, además de ser advocaciones cristianas, comparten mucho: son toponímicas (vírgenes de ese sitio, no de una advocación “temática”, como los Dolores o la Inmaculada), son objeto de una devoción que va bastante más allá de los valles inmediatos, hay muchos testimonios documentados de donativos por su intercesión en las circunstancias más variadas y los lugares más lejanos, etc. Y sobre todo, atraen la devoción de los pastores trashumantes... o tal vez sea más correcto decir que sus devociones surgieron por ser zonas de pastoreo. También tienen sus diferencias: Arantzazu es más “meteorológica”, vinculada tanto a la lluvia y las tormentas como a la sequía (cara y cruz de un difícil equilibrio atmosférico), mientras que la de Núria está muy invocada para la fertilidad.

En ambos casos, como en otros muchos, suponen la cristianización de creencias paganas, y en ambos la sustitución del culto pagano por el cristiano se presenta como una victoria del cristianismo… para seguir haciendo lo mismo. En Arantzazu, los pastores entregaban ofrendas de corderos al convento. Una vez, “gaiztoa” (la mala, puesto que se trata de un genio femenino, con un nombre que ya indica el cambio de percepción del genio pagano; Barandiaran pone ejemplos de ofrendas voluntarias de carneros a Mari, y ya se ha hablado de ello y sus correspondientes pirenaicos catalanes hace pocas entradas) arrebató a un pastor la ofrenda, hasta que un fraile se atrevió a entrar en su morada, una sima, y llevarse “lo que era suyo”. 
Arantzazu y Núria, centros pastoriles y religiosos y en la actualidad también,
cada cual a su manera, turísticos, e identitarios vasquistas o catalanistas…
¿tal vez por el profundo poder evocador –eso que se suele denominar “mágico” –
de ambos espacios naturales? Eso sí que daría para varias entradas
En Núria se da el mismo proceso de sustitución: era un sitio plagado de genios paganos, a los cuales “Els pastors de Núria estaven obligats a retre’ls culte perquè eren els déus protectors dels ramats i dels pastors”, divinidades a las que habían “d’oferir ovelles i moltons en sacrifici”. El resultado es el mismo: los pastores “pagan la protección” que reciben; pero en el paganismo se presenta como una obligación no deseada, incluso un robo, y en el cristianismo, como ofrenda… ¿totalmente voluntaria? Vamos a dejarlo ahí por ahora.
La oveja latxa con sus variantes, o la xisqueta pallaresa, son dos ejemplos
de adaptación natural cultural de las especies autóctonas a su paisaje.
 
Tradicionalmente, se ha planteado la supervivencia de ritos y mitos paganos en el Pirineo durante dos milenios como una rareza, fruto del aislamiento y de una tardía y deficiente cristianización. No es exclusivo del Pirineo. En Bretaña, país de leyendas donde los haya, a la vez que muy católico hasta hace nada, esa pervivencia se ha interpretado del mismo modo.
Museo del pastoreo en Llessui, en la cabecera de la Vall d'Àssua y una de las
entradas al ampliado Parque de Aïgues Tortes i Sant Maurici:
bendición de los rebaños el día de San Antoni, 17 de enero.
Urkiola, otro centro pastoril en un parque natural con un santuario dedicado
a dos santos Antonios y su propio centro de interpretación, se merece otra entrada.

Anuntzi Arana lo explica, por decirlo rápidamente, dándole la vuelta: la persistencia de elementos paganos se entiende precisamente por un sincretismo con la religiosidad popular cristiana, que no siempre es lo mismo que predica el dogma de la Iglesia Católica. En cuanto el cristianismo ha dejado de ser el eje que concibe y explica el mundo y las relaciones sociales, los elementos paganos han dejado de tener sentido y la cadena de transmisión de relatos se ha cortado, incluso en lugares montañosos cuyo modo de vida sigue siendo básicamente pastoril, como son Núria y Arantzazu.
Si no se hubiesen reinterpretado los relatos de Arantzazu y Núria como la victoria cristiana, tal vez no nos habrían quedado constancia de esos cultos y ofrendas paganas.  

2012/09/02

Harrigarriak

Aurreko sarreraren bukaeran ziztrin samar agertu nintzen, Itsasuko euskara eta Benavarriko katalana zela eta. Egin ere, “besteari” buruz hizkuntzaren aldetiko iruzkin bat egin nuen, euskara inexistentea dela esatera ere iritsi nintzelarik. Bretainiatik heldu berria naiz, eta hango egoera linguistikoaren ondoren, eta berriro ziztrin samarra agertzen banaiz ere, euskaldunok basatiak bai, baina oraindik orain baso zokoaren kobazuloetan arras gorderik ez gaudela aitortu behar. Ederki dakit leku turistikoak ez direla inondik inora hizkuntza indigenak entzuteko aproposenak, eta euskararen edo baita katalanaren bizitasuna Guggenheimen edo Sagrada Familiaren arabera neurtuko bagenu, Bretainian ia bezalaxe agertuko ginatekeela, errotulazio hutsetara mugatuak. Baina, hala eta guztiz ere… Nik entzuterik izan gabe ere, nonbait eginen ahal dute bretoieraz! Espero dut Britainia Handiko lehengusu kornikoek ez bezala, ez direla zain egonen azken hiztuna hil eta ehun urtera berriro hizkuntza berpizteko.
Le circuit des Korrigans (intxixu moduko pertsonaiak):
herri mitologia, gaztetxoendako proposamen turistikoen erakargarri.
Duda egiten dut, ordea, blog honetako gaira helduta, Broceliande omen zen basoan eginen dutela berrikuntza, Merlin, Arturo, Morgana, Viviana eta enparauak oinarritzat hartuta. Mitologiaz ari garela, sarritan jatorrietara jotzen dugu, horrek askorik agertuko balu bezala. Bretoieraren eta katalanaren jatorria arrunt urruti daude, biak  indoeuroparrak izanagatik. Euskararen aldean, zer esanik ez! Baina egoera soziolinguistikoak antzekoak izan daitezke, batez ere hiru hizkuntzon frantsesarekiko harremanetan. Serge Plenierek idatzi bretoieraren historia euskararena ere izan liteke, batzuetan ia hitzez hitz: jatorriak jatorri, instituzioetatiko urruntze gero eta handiagoa, fede katolikoari loturiko hizkuntzaren atxikimendua, dialektoen eta grafien arteko ulergarritasun-arazo ustez konponezinak, eskola, armada eta oro har administrazioaren eragina, eta XX. mendeko arlotekeriarekiko pertzepzioa… Mitologia biziekin gauza bera esan genezake. Juan Inazio Hartsuagak euskal mitologia eta indoeuroparra alderatzean oso desberdinak direla frogatu du. Baina nago “herri mitologian” Bretainiakoa eta Pirinioetakoa ez direla horren diferenteak, hango eta hemengo baserritarren bizimodua eta pentsamolde kristau-paganoa ere ez zelako.  
Bretainiar topiko guztiak salgai, parpailazko burukoak izan,
gurina izan, eguraldia izan, mitologia zeltikoa izan.
Autentikotasuna ondare bihurtzen da... turisten nahien karietara:
paristarrek, behin Eiffel dorrea begien bistatik utzi eta dena batera nahi omen dute.
Arrain-kontserba tipikoetan, "à la luzien" sardinak ere kausitu genituen,
au piment d'Espelette et au jambon de Bayonne. 
 
Adibide baten alderaketa, behingoz Pirinioetatik urrun… baina blog honetako lehen sarrerara zuzenean garamatzana: harri bihurtzearen zigorra, elementu natural bat edo aztarna arkeologiko bat klabe moralean ulertuta. Izan ere, Bibliak kontatzen digu Loten andreari zer gertatu zitzaion. Bretainian, herriko menhir lerrokadurak (horiek bai harrigarriak, euskarazko zentzu guztietan!) gerora etorri kultura guztiek berrinterpretatu dituzte. Herri-erlijiotasun katolikoaren arabera, Korneli santu bretoiak (izenak dioen bezalaxe, adardun abereen patroia, beharbada zelten Cerunnos adardunaren interpretazio kristaua) jazarka ari zitzaizkion paganoak madarikatu eta harri bihurtuta geratu dira.
Talde baten bisitaldi gidatua. Jendetzaren kalteak saihesteko, udan ez dago libre sartzerik.
Halaber, bertako ardi espeziea berreskuratzen ari dira, landa atlantikoa maten dezan.
Gehiegizko higadurak zein basoen ugaltzeak, sustraiak direla eta, megalitoak lurrera bota ditzake.
Berriro ere, paisaia eta bertako espezieak ezinbesteko osagaia dira halako ondare motan.

Ebro ibaiaz bestalde, Autol herrian, ondoko ermitan lapurreta egindako bikotea ere, el Picuezo eta la Picueza, hantxe geratu dira zigorturik, harri bihurtuta.
Sant Mauricin bezala, hemen fenomeno naturala da begi moralez interpretatu dena.

Errioxa, Karnag, Andrearriaga eta Sant Maurici, paisaiak eta kulturak lehen begiradan erabat desberdinak… geure begietatik begiratuta.